El Día Mundial de la Conservación de la Naturaleza tiene un significado particular y ha sido creada por reconocer y subrayar que un medio ambiente sano es de una importancia primaria para una sociedad estable y saludable para los hábitats y los hombres; se celebra el 28 de julio de cada año. Hay una gran necesidad de actuar para garantizar el bienestar de las generaciones presentes o futuras. Todos nosotros, como habitantes de este planeta, debemos participar en la protección y conservación del medio ambiente y de la naturaleza de forma responsable.

Esta jornada particular debe servir para animar a las personas a salvar y proteger los recursos naturales de la tierra y cambiar nuestro comportamiento para generar un desarrollo sostenible y poner fin al deterioro de nuestro ambiente.

El Día Mundial de la Conservación de la Naturaleza también tiene la finalidad de educar a las personas sobre la mejora de nuestros patrimonios naturales porque la tierra tiene solo una cantidad limitada de recursos y nosotros dependemos, en gran medida, de estos recursos para mantenernos. Estos elementos son el agua dulce, el aire, el suelo y los bosques, lo que nos debe estimular para actuar con responsabilidad para preservarlos. Esta conmemoración está estrechamente unida al Día Mundial del Medio Ambiente (5 junio), que tiene un carácter más oficial porque es una jornada sostenida por las Naciones Unidas.